Cambiar esta realidad es posible, hay casos muy exitosos que lo demuestran, pero se requiere de voluntad y de procesos participativos de base, dando el paso definitivo a una gobernanza real y con un enfoque holístico. La gestión participativa del agua es el motor para dinamizar la implementación de políticas nacionales en materia de medio ambiente, adaptación al cambio climático y recurso hídrico en Colombia y en muchos países de Latinoamérica. El manejo participativo del recurso hídrico y su ordenación puede tener efectos maravillosos en la gestión del territorio e incluso en la resolución de conflictos a niveles de decisión que superan el ámbito medioambiental y trascienden a lo social y político. Es necesario transferir conocimiento, tecnologías y capacidades a quienes gestionan el agua en ámbitos rurales, consiguiendo desenvolverse en el marco legal, fiscal, comercial, sanitario y ambiental del suministro de agua. Así mismo es evidente la tendencia mundial para abordar la gestión del agua: invertir en mecanismos de participación social eficaces que se traduzcan en focos de gobernanza y que contribuyan a impulsar procesos hacia una gestión del agua más equitativa, eficiente y sencilla. Es necesario robustecer las organizaciones de base, haciéndolas capaces de acceder a recursos públicos y dotándolas con soluciones tecnológicas apropiadas y sostenibles (simples, costo-eficientes, basadas en la naturaleza y compatibles con energías alternativas) para garantizar un suministro de agua potable en optima cantidad y calidad. El mundo cuenta con políticas planetarias, los Objetivos de Desarrollo Sostenible, regionales (Directiva Marco del Agua – Europa), y nacionales (PNGIRH – Colombia), que parten de bases conceptuales similares en cuanto al agua como recurso, derecho, y sujeto de manejo participativo y gobernanza. Latinoamérica tendrá que unirse, ajustar y dar aplicabilidad real a sus políticas nacionales para una gestión justa y transparente del recurso hídrico.
Desde la Fundación Humedales, creemos profundamente en este enfoque y somos conscientes que “el agua es el combustible de nuestro futuro”. Es por ello que, junto con las comunidades, apoyamos proyectos de Gestión Participativa del Recurso Hídrico, con la implementación de Soluciones Basadas en la Naturaleza (SbNs), las alternativas para un futuro sostenible. Un ejemplo es el proyecto Agua Segura para Colombia, que ha consistido en el robustecimiento organizacional en las comunidades de Bocas del Carare e Isla Renacer, para formalizar sus Asociaciones de Usuarios/Suscriptores de Acueducto y Alcantarillado. Además, se llevó a cabo la renovación y ampliación de la infraestructura de suministro de agua potable alcanzando un 100% de cobertura, la consecución de subsidios para viabilizar una correcta operación de la infraestructura en el largo plazo, y el establecimiento oficial de las Asociaciones como Prestadoras de Servicios ante la Comisión de Regulación del Agua y la Superintendencia de Servicios Públicos. Todo esto con el apoyo del Ministerio Federal de Cooperación para el Desarrollo de Alemania, la Fundación Wilo, Global Nature Fund, la Fundación Humedales, FEDARBOY y el municipio de Puerto Parra. Hoy, ASUAISRE (Asociación de Usuarios de Acueducto de la Isla Renacer) y ASÄBCARARE (Asociación de Suscriptores de Acueducto y Alcantarillado de Bocas del Carare) ofrecen 100 litros de agua potable diarios por persona y el tratamiento de aguas residuales doméstica a más de 700 vecinas y vecinos, fruto de un ejercicio participativo, humanizado y muy conectado con la realidad comunitaria y ambiental.
Sobre el autor
Julia Pérez Sillero es ambientóloga, especialista en Cooperación Internacional al desarrollo, gestión y manejo participativo del recurso hídrico y consultora para ONGs. Es coordinadora de la unidad de cooperación internacional de la Fundación Humedales de Colombia y una convencida plena del poder de cambio que se genera cuando se trabaja de la mano con las comunidades.
La Fundación Humedales es una ONG colombiana fundada en el año 2000 en Bogotá, con el propósito de contribuir a la conservación y manejo de los ecosistemas acuáticos, a partir de un enfoque integral humano y ambiental. En cumplimiento de este propósito, desarrollamos proyectos de conservación, gestión y manejo participativo de recursos naturales, programas de educación ambiental, mejoramiento de prácticas productivas y fortalecimiento de las asociaciones comunitarias; desarrollando a la par estrategias de inclusión de género y de grupos minoritarios a la investigación científica.
