Sônia, eres una líder muy importante de los pueblos indígenas en Brasil y tu trabajo tiene mucho que ver con las mujeres indígenas de las comunidades. ¿Puedes explicarnos cómo este conocimiento tradicional de las mujeres indígenas en tu pueblo está entrelazado con la conservación de la naturaleza?
Nosotros tenemos una cultura viva, con fiestas, canciones y bailes que fortalecen nuestra identidad, nuestra forma de vida. Para vivir nuestra cultura, necesitamos el bosque en pie, necesitamos una naturaleza viva. Así que luchamos día tras día, tenemos esta extensa relación natural con el medio ambiente, porque sin un medio ambiente protegido, tampoco podemos vivir nuestra cultura. Por lo tanto, es natural para nosotros proteger y conservar nuestros ecosistemas para poder vivir nuestra cultura.
¿Qué prácticas tradicionales hacen ustedes que cuidan a la Madre Tierra?
Tenemos nuestras fiestas. La fiesta de la “niña mujer”, por ejemplo, es una fiesta que ocurre en el verano. Para esta fiesta los hombres van al bosque a cazar los animales que usamos en nuestro ritual, y la caza también es una forma de monitorear el territorio. Así que son prácticas tradicionales que también fortalecen la cultura.
¿Cuáles crees que son las prioridades de las mujeres indígenas en relación con la conservación de la naturaleza? En tu pueblo, ¿cuáles son sus prioridades, como mujeres indígenas?
Nosotras, mujeres indígenas, tenemos varias iniciativas que llevamos a cabo en las comunidades, como la artesanía, la educación o la salud. Y para todas nosotras esto es muy importante que suceda de manera satisfactoria dentro de las comunidades, porque nos permite quedarnos allí, y nuestra presencia en el territorio ya evita la deforestación. Por eso es importante que las políticas públicas, que el Estado brasileño pueda estar presente, para dar las condiciones para que permanezcamos en nuestro territorio.
¿Cómo crees que la UICN puede promover y proteger más ampliamente las prioridades de las mujeres indígenas?
Creo que la UICN debe reconocer el papel que desempeñan los pueblos indígenas en el equilibrio climático, en la regulación de las lluvias, reconocer cómo las formas de vida de los pueblos indígenas contribuyen a la preservación y protección del medio ambiente. Así que pensar en la conservación, es pensar primero en la protección de los derechos culturales y sociales, garantizando las formas de vida de cada pueblo dentro de sus territorios. La conservación no es sólo pensar en la vegetación, ni en el paisaje con los animales, hay que pensar también en las personas que viven allí, y eso es lo que garantiza el sistema completo.
A partir del 2020, tendremos eventos estratégicos, como el Congreso de la UICN y las discusiones de la CDP del CDB. Como mujer indígena, ¿qué te gustaría aportar a estos espacios de discusión sobre la conservación de la naturaleza? ¿Qué quieres que se discuta y qué quieres que se cumpla?
Hemos aportado mucho, hemos aportado muchas demandas, muchas propuestas. Cada año, se discuten las formas de conservación a nivel regional, nacional e internacional. Creo que lo más importante ahora es presionar a todos estos organismos gubernamentales nacionales e internacionales para que implementen todo lo que se propone aquí, para que pongan en práctica todos estos discursos, todos estos acuerdos. Creo que en este momento, la prioridad es la aplicación de los acuerdos.
Tienes ahora la oportunidad de enviar un mensaje al mundo entero, como mujer indígena de Brasil. ¿Cuál es tu mensaje principal al mundo?
El mundo entero necesita entender que la lucha por la Madre Tierra es la madre de todas las luchas.
Sobre el autor
Sônia Guajajara es una activista, ambientalista y política indígena brasileña. Es la Coordinadora Ejecutiva de la Coordinación de Organizaciones Indígenas de la Amazonía Brasileña (COIAB).